SEMBLANZA
—Un río y a su orilla un abigarrado conjunto de casas multicolores.
—Un río sin principio ni fin, porque para los trianeros este río comienza y termina en
Triana.
—Un puente de encaje, delicado y suave, que, apoyándose sobre celestes aros, da
un alegre salto de una orilla a otra.
—Un puente que parte la orilla por su centro y penetra en las entrañas del barrio.
—Un puente lleno de añoranzas, amable y sencillo mirador para el recuerdo y la
abstracción.
—Una muralla que levanta las casas sobre el río y casas con cubiertas y tejados.
—Una torre y otras torres que emergen del Caserío como lápices afilados, cuajadas
de campanas y azulejos.
—Una calle que discurre junto al río y otras calles paralelas y perpendiculares, con
un trazado simplista pero encantador
Triana del Recuerdo